Si en nuestro primer capítulo de
Canciones dedicadas hablábamos de temas que otros artistas dedicaron a los beatles, hoy vamos a ver canciones que los chicos de Liverpool se dedicaron entre ellos. Y lo titularemos Canciones de amor y odio.
Por todos es sabido que la separación de los Beatles en 1970 fue algo más que desagradable. Antes, las relaciones entre ellos podían haber pasado por situaciones críticas aunque nunca se llegaba al punto de no retorno. Pero en los últimos momentos del grupo y, sobre todo, tras la disolución ya solo faltaban las pistolas. De todas formas, y pese a ser el mejor grupo del mundo, yo siempre he pensado que las relaciones personales eran algo que debía quedar entre ellos, pero cuando haces pública tan "cordial" amistad a través de declaraciones en los medios y sobre todo lo plasmas en tus discos la cosa toma otro cariz.
El primero que demuestra su descontento con los otros Beatles será George Harrison en
Wah wah, canción que aparecerá en su exitoso disco All things must pass de 1970, aunque se gestó durante las grabaciones del proyecto Get back, o sea cuando todavía el grupo aguantaba. Es palpable su hartazgo del dúo principal Lennon-McCartney aunque curiosamente nadie se da por aludido.
Cuando comienza la batalla pura y dura entre los cuatro Beatles, en un principio, el más dolido de los cuatro con la separación y con el cómo se produjo es Paul McCartney. Los otros tres no entienden su postura y hacen un frente común contra el bajista (no entraremos a valorar las circunstancias de uno y otros). Así, Macca, en su disco Ram lanza en
Too many people unas cuantas pullitas a sus excompañeros pero todo muy al aire, sin un "aparente" destinatario concreto.
Inmediatamente John Lennon se da totalmente por aludido y le devuelve la jugada en
How do you sleep? del álbum Imagine. Atentos a la miradita de George Harrison (en 1:09) que interviene en la grabación.
Desgraciadamente la cosa estuvo mal entre ellos durante bastante tiempo aunque hubo momentos que permitieron la colaboración de unos en los discos de los otros, que no es poca cosa. En fin, que la sangre no llegó al río.
El tiempo, la cordura, la madurez, la experiencia... creo que fueron poniendo las cosas en su sitio. Pero sobre todo, y desgraciadamente, el asesinato de John Lennon en 1980. Así, de nuevo, George Harrison vuelve a ser el primero en despuntar y hace su particular homenaje a su amigo fallecido en su disco Somewhere in England de 1981 con
All those years ago.
Al año siguiente es Paul McCartney el que hace lo propio con su media naranja musical en el álbum Tug of war marcándose una maravillosa balada en su recuerdo con
Here today.
En 1987, y otra vez George Harrison, firma una canción,
When we was fab, en homenaje a sus excompañeros y recordando los buenos y malos tiempos de la beatlemania.
En 2001 se produce el fallecimiento de Hari. Y un par de años más tarde es Ringo Starr el que demuestra su reconocimiento en Ringo Rama al beatle caido y con el que probablemente estaba más unido:
Never without you, y con Eric Clapton a la guitarra.
En 2005, Paul McCartney también hace lo mismo en el disco Chaos and creation in the backyard con
Friends to go.
Y por último, y que yo sepa, Ringo vuelve a la carga con Y not en 2010. Acompañado de su amigo Macca al bajo le brindan un homenaje a Juanito en
Peace dream.
Una vida intensa en todos los aspectos para los cuatro. La Beatlemania fue tan profunda para ellos que les dejó tocados de por vida, y no me refiero desde el punto de vista musical y lo que representaron para los demás, sino lo que significó para ellos mismos, interiormente. Y sobre todo lo que significaron sus excompañeros para cada uno de ellos. Sus amigos, sin ex delante.