El sonido de ambos estilos es totalmente distinto. Innegable. Pero ambos me gustaban, ambos me llamaban la atención. Lo curioso fue el día que Edu se presentó con un disco de un grupo inglés llamado Dire Straits en el que estaban dos hermanos de apellido difícil de pronunciar, al menos para mi, Knopfler. Menudo sorpresón. Qué sonido más distinto. Para este grupo hacer una apuesta tan arriesgada en un momento en el que el punk lo inundaba casi todo en Inglaterra debió ser cosa de titanes. Y en España lo que sonaba era básicamente Camilo Sesto, Triana, Village People y Patrick Hernández. Pero llegaron, vieron y vencieron (o convencieron).El disco en cuestión se llama Communiqué (1979) y se inicia con uno de los punteos mas electrizantes que he escuchado, de solo unos segundos pero qué segundos. El resto es para degustarlo, sonido limpio y depurado, íntimo, excelentes letras y todo compuesto por Mark Knopfler. Ahora mismo me lo estoy escuchando de principio a fin con sus ralladuras y huevos fritos ya que es en vinilo (of course).
Este fue el disco que me descubrió a Dire Starits. Pero luego vino Making Movies (1980). Distinto, más guitarrero, no sé si podría decir mas americano pero con otra maravillosa colección de canciones. Y de nuevo esas increíbles letras bien armadas con un sonido compacto. Podría haber hecho dos entradas diferentes para cada disco pero si cito ambos discos de seguido es porque para mí van juntos pese a ser tan distintos. O quizás hablamos de una normal progresión del grupo que demuestra no estancarse en su estilo. Todavía no consiguieron el gran éxito que vendría con Brothers in Arms en 1985 pero ya iban despegando.
Por cierto, el nombre del grupo se puede traducir como apuros económicos. Curioso ¿no?
A otros estilos nombrados más arriba ya volveremos otro día.
De Communiqué Once upon a time in the west. De Making Movies Solid Rock
Este grupo, que me gustó en los 80, pero se me desinfló con elpaso de los años, consiguió, gracias a Mark Knopfler un sonido característico. Y eso está bien. El problema, creo yo y en eso diferimos, es que se repitieron hasta la saciedad.
ResponderEliminarHoy día no me dicen nada.
Algunas veces suele pasar que discos o grupos que nos gustaban en un momento determinado, con el paso de los años, ya no le vemos la gracia al asunto. No sé porqué. Si los traigo aquí es porque considero que fueron importantes en la historia de la música, que tuvieron un sonido particular y distinguible del resto y porque siempre hay una historia particular detrás que nos hace mirarlos diferentes.
ResponderEliminarEsa gente tenía muchísima calidad. Pero para mí, de manera muy personal, hubo algo que los mató: a mediados de los 80 llegó un momento en que sonaron demasiado, de una manera abusiva. Me pasó con ellos y con "Born in the USA" de BS. Llegó a ser vomitivo entrar en los lugares habituales de copas y tener siempre, siempre de música de fondo aquellos dos discos. (Bueno, y Golpes Bajos, que nunca me gustaron).
ResponderEliminarEstoy de acuerdo tanto contigo como con PPK. Es verdad que si algo suena demasiado al final cansa y su efecto es el contrario al buscado. Es curioso que menciones al Boss porque efectivamente esa canción en concreto se ha vuelto pesada y, sin embargo, tiene una letra impresionante. Pero ese disco en concreto sigue teniendo al mas puro Springsteen y ¡ay! amigo éso es innegable. Así que admito Pulpo como animal acuático, a Mark Knpl?&$# o como se diga y los suyos les ponemos notable alto en sus inicios y lo posterior queda para cada uno.
EliminarPor otro lado me hace gracia lo de Golpes Bajos porque esos si que resultaron cansinos, aunque parafraseándolos diré que tenían razón conque son malos tiempos para la lírica (y otras cosas).
Saludos y gracias.