Los Beatles y yo. Música y de todo un poco.

sábado, 24 de noviembre de 2012

Sergio Mendes

Volviendo al estupendo movimiento musical que significó la bossa nova y del que ya hablamos hace poco, hoy traigo a otro representante de este estilo brasileño, Sergio Mendes. Su carrera venía de lejos, desde finales de los cincuenta y en torno al jazz, aunque su gran éxito llega con Brasil '66, formación en la que reúne a algunos de los músicos más reconocidos de su país y en el que ya muestra abiertamente ese estilo tan representativo de Brasil.
La simpatía de Sergio Mendes por los Beatles se demuestra en las diversas versiones que realizó a lo largo de su carrera: Day tripper, The fool on the hill, Norwegian wood... Aunque también realizó versiones de otros como Simon y Garfunkel y Burt Bacharach.
Y el sencillo que puedes ver al lado es precisamente el correspondiente a The fool on the hill, editado en 1968. Algunos le acusaron de que traspasaba de vez en cuando la frontera de la bossa al easy listening pero lo que no se le puede negar es el éxito que tuvo. Y es, además, otra forma de escuchar a los Beatles.

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Travelling Wilburys

Creo que no hace falta  presentar a este grupito de amigos pero por si a alguno le falla la memoria hablo de cinco "muchachos" que por gusto se reunieron para formar un conjunto musical: Roy Orbison, Bob Dylan, George Harrison, Tom Petty y Jeff Lyne. Entre los cinco suman una buena parte de la historia de la música pop.
La cuestión era que estos chicos se lo pasaban tan bien cuando estaban juntos tocando que decidieron grabar un disco y, mira tú por donde, consiguieron que tuviera éxito llegando bastante arriba en las listas.
Al parecer todo surge en la grabación del disco que en ese momento estaba preparando Tom Petty y en el cual colaboraban algunos de los integrantes de los futuros Willburys. Además, por hacer una gracia, cada uno adoptó un nombre distinto y todos se apellidaron Willburys.
Desarrollaron un estilo muy americano y en esta canción en particular destaca su ritmo de tren o boogie-woogie, un estilo como ya digo totalmente americano, y guitarras slide a lo largo de todo el disco. La participación de todos tanto en las composiciones como en las interpretaciones instrumentales y vocales se produce casi de forma igualitaria.
Este tema de hoy está encuadrado en su primer lp The Travelling Wilburys y pasó a ser la cara A de su segundo sencillo. Aunque lo que yo traigo no es un single al uso sino la versión extendida que se publicó en formato de doce pulgadas. Lo curioso es que este disco lo compré en el mercadillo al increíble precio de dos euros. Es verdad que tiene algún ligero roce en su carátula y una pegatina pero está bastante bien en conjunto. Lo que se me quedó grabado es que cuando le dije al vendedor que me llevaba ese disco lo miró varias veces por delante y por detrás. Creo que se dio cuenta de lo que me llevaba y que el precio que él mismo había marcado era un tanto ridículo. C'est la vie, mon ami.
Lo triste de este vídeo es la ausencia física de Roy Orbison fallecido poco tiempo antes pero al que sus camaradas rinden tributo con su foto presente y una mecedora en la que reposa su guitarra.
Venga, súbete al tren y disfruta: End of the line

sábado, 17 de noviembre de 2012

Getz-Byrd

Rebuscando en el armario de los discos de casa de mis padres he encontrado otro disquito que no está nada mal y del que no recordaba su existencia: Stan Getz y Charlie Byrd unidos en Desafinado. Este es el sencillo que se extrajo del lp Bossa Nova de 1962. Es curioso que fuesen dos americanos los que enseñaron al mundo la existencia de un gran estilo surgido en Brasil en la segunda parte de la década de los cincuenta, mezcla de la samba y el jazz, la bossa nova.
Ya que hablaba el otro día de las influencias de algunos de mis hermanos, es de lógica que hablemos de las múltiples influencias de mi señora madre desde el punto de vista musical, y de primeras hoy hablaremos de una de ellas, el buen jazz (si es que hay jazz malo). Y este disco obviamente es suyo. He de decir antes de nada que no entiendo mucho de jazz, pero creo sinceramente que ésto es como el buen vino, aunque tampoco sé nada de enología ni soy sumiller pero cuando pruebas uno bueno dices lo de "éste me gusta".
Así que degusten ustedes este disco como se hace con una buena copa de vino, tómense su tiempo, paladeen bien el caldo y disfruten: Stan Getz y Charlie Byrd Sextet

miércoles, 14 de noviembre de 2012

Dire Straits

Una de las cosas más llamativas que recuerdo de mi niñez es la gran cantidad y variedad de música que entraba en casa. Mi hermano Eduardo fue el principal artífice de que conociera a los grandes del rock urbano en la España de los setenta: Leño, Asfalto, Topo, etc. de los que ya hemos hablado hace poco. Por contra mi hermano Iñaki, era abiertamente seguidor del movimiento punk con los Sex Pistols, Clash, Parálisis Permanente o Siniestro Total entre otros. Tanto unos como otros se movieron al final de una década y principio de la siguiente (setenta-ochenta).
El sonido de ambos estilos es totalmente distinto. Innegable. Pero ambos me gustaban, ambos me llamaban la atención. Lo curioso fue el día que Edu se presentó con un disco de un grupo inglés llamado Dire Straits en el que estaban dos hermanos de apellido difícil de pronunciar, al menos para mi, Knopfler. Menudo sorpresón. Qué sonido más distinto. Para este grupo hacer una apuesta tan arriesgada en un momento en el que el punk lo inundaba casi todo en Inglaterra debió ser cosa de titanes. Y en España lo que sonaba era básicamente Camilo Sesto, Triana, Village People y Patrick Hernández. Pero llegaron, vieron y vencieron (o convencieron).
El disco en cuestión se llama Communiqué (1979) y se inicia con uno de los punteos mas electrizantes que he escuchado, de solo unos segundos pero qué segundos. El resto es para degustarlo, sonido limpio y depurado, íntimo, excelentes letras y todo compuesto por Mark Knopfler. Ahora mismo me lo estoy escuchando de principio a fin con sus ralladuras y huevos fritos ya que es en vinilo (of course).
Este fue el disco que me descubrió a Dire Starits. Pero luego vino Making Movies (1980). Distinto, más guitarrero, no sé si podría decir mas americano pero con otra maravillosa colección de canciones. Y de nuevo esas increíbles letras bien armadas con un sonido compacto. Podría haber hecho dos entradas diferentes para cada disco pero si cito ambos discos de seguido es porque para mí van juntos pese a ser tan distintos. O quizás hablamos de una normal progresión del grupo que demuestra no estancarse en su estilo. Todavía no consiguieron el gran éxito que vendría con Brothers in Arms en 1985 pero ya iban despegando.
Por cierto, el nombre del grupo se puede traducir como apuros económicos. Curioso ¿no?
A otros estilos nombrados más arriba ya volveremos otro día.
De Communiqué Once upon a time in the west. De Making Movies Solid Rock

domingo, 11 de noviembre de 2012

MTV (si es que existe)

El otro día me puse a ver la tele e iba pasando de un canal a otro por puro aburrimiento. En eso estaba cuando recalé en la cadena MTV y dije: "voy a ver cuando dan algún programa de música, videos o similar interesante". Me repasé la parrilla entera para darme cuenta que la parte musical comenzaba a las tres de la mañana y terminaba a las seis a.m. y que casi todo lo demás se dedicaba a programas de reality y telebasura. Yo había visto algunas veces este canal (hace tiempo, es verdad) y recuerdo de ver casi en un 90% música, sino más, y de todo tipo. Sobre todo los famosos videoclips que lanzaron a MTV y de paso a muchos artistas a la fama. ¿Dónde se ha quedado aquello?
Sí, así me he quedado al saber que han quitado Rockopop
A la par que buscaba mi moral por el suelo después de este incidente me vinieron a la mente la gran cantidad de programas musicales que me había chupado desde mi tierna infancia: Aplauso, Popgrama, Caja de ritmos, Musical express, La edad de oro, Plastic, Qué noche la de aquel año o el del nombre impronunciable Auambabuluba balambambú. Hubo más, también de corte clásico que, según he podido ver, todavía se mantienen hasta para los niños (loado sea Dios) y que así abandonen por un momento a los puñeteros Pokemon. Y en cualquier caso el/la presentador/a sabía de lo que hablaba porque muchos eran periodistas especializados en música o procedían de programas similares de la radio: Uribarri, Carlos Tena, Diego A. Manrique, Ángel Casas, Paloma Chamorro...
¿Ya no quedan programas de música interesantes y en horario normal?¿Dónde fueron a parar aquellas tardes de sábado con la merienda en las manos y música en la tele? Dejando de lado las televisiones de pago, me he puesto a rastrear en las emisiones en abierto y he encontrado algunos programas en diferentes canales pero las horas de difusión son para noctámbulos. Supongo que para los directivos de los canales son programas de relleno que algún desocupado (generalmente desempleado, que de esos ahora hay muchos) verá a altas horas.
Te dejo para que recuerdes (si tienes años) la entrada del programa Musical Express del gran Ángel Casas donde puedes ver la variedad de música que programaba.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Capitán Trueno y Asfalto

Hay un momento brillante en la historia de la música española que parece algunas veces un tanto olvidado. Se produce en la segunda parte de los setenta cuando amparados por el sello Chapa Discos aparecen un gran número de grupos de rock: Leño, Ñu, Mermelada, Cucharada, Tequila y el genial Moris del que ya hablamos en otra entrada... Y más tarde vendrían Obús, Barón Rojo y Panzer entre otros. Y previos todos ellos a la famosa Movida, que si bien trajo a otro gran número de formaciones, creo que el nivel no fue mejor a los primeros. Es verdad que los hubo buenos y muy buenos pero comparativamente no tanto. Cosa distinta es que la explosión artística de los ochenta en España se ampliase a otros aspectos estéticos y no solo la música: el cine, la fotografía, la pintura y la ilustración, etc. Quizás por todo ello este rock setentero ha quedado un poco relegado.

Dentro de esa década y ese sello nos encontramos a la banda Asfalto, un cuarteto madrileño que, si bien su formación original no va a durar mucho, nos van a dejar los temas mas conocidos del grupo y de ese estilo que tanto se escuchó en los setenta llamado rock urbano. En su primer disco de 1978 cuyo productor fue Vicente "Mariscal" Romero (y creador de Chapa) aparecen canciones como Días de escuela, Rocinante, Ser urbano que demuestran una gran nivel compositivo con letras de gran contenido y poesía. Pero si hay una que realmente les hizo conocidos y que aún mucha gente recuerda fue El Capitán Trueno. La traigo a colación por dos motivos. El primero se debe a que ya que estamos recordando últimamente aquí tebeos con solera cómo no hacerlo con uno de los personajes mas importantes de la historieta española. Y lo segundo es porque nos volvemos a encontrar con letras con mas de treinta años de historia y que continúan teniendo una gran vigencia. Desgraciadamente todavía podríamos decir eso de "Ven Capitán Trueno, haz que gane el bueno, Ven Capitán Trueno que el mundo está al revés".

Para terminar voy a añadir que nuestro grupo de hoy tiene también relación con los Beatles, ya que allá por 1976 editaron un disco titulado Homenaje a los Beatles, y creo que con bastante acierto. Y si no haz tú mismo la valoración.

sábado, 3 de noviembre de 2012

Una de pinturitas

Mira que he intentado veces pintar maquetas y hay que ver la de veces que he terminado decepcionado con el resultado. No es que tenga mucha idea al respecto y, además, quiero que salgan estupendas a la primera y éso es algo muy difícil. Pero esta vez he intentado ponerle un poco más de ganas y un poco más de calma. La conclusión final no está mal, mejorable desde luego, pero de momento es lo que hay.

Bien. Allá por el 2007 o 2008, en una de mis primeras compras (si no la primera) a través de la red me hice con unas figuritas de plástico de los cuatro Beatles. El fabricante de estos muñecos es Emirober y se vendieron en la década de los sesenta o setenta. He encontrado poca información al respecto pero si no me equivoco se trata de una marca española que destinaba su producción a kioskos y tiendas de pipas, o sea, hablamos de productos baratos. Se vendían en bolsas transparentes de plástico al que iba grapado un cartón como cierre y presentando el artículo con la palabra Beatlemania. Para este caso en concreto se podían encontrar cuatro cartones distintos, cada uno con la cara de un Beatle. El que aquí presento trae el rostro de Ringo Starr. Cada figura es de un solo color, siendo para un mismo paquete cuatro figuras con colores distintos aunque podían variar para otros envoltorios perfectamente. El caso es que vistos de primera vez eran como los muñequitos de indios y vaqueros que vendían hace treinta y cuarenta años.

Como ya he dicho antes, no tengo muchos conocimientos de pintura en maquetas, así que, aparte de lo poco que he leido en internet, he trabajado a la manera de ensayo-error. Así puedes ver en la primera foto el primer error que cometí. Comencé pintando con rotuladores de retocar encima del plástico sin más. El color negro agarró bastante bien pero el resto de los colores patinaban que daba gusto (McCartney pasó de verde a chocolate). Habiendo aprendido la primera lección, compré una imprimación gris que permite que agarre casi cualquier pintura que le des y todo comenzó a ir mejor. Fui aplicando pinturas acrílicas que también fueron muy bien, desde los colores mas predominantes, y rotuladores de retocar para determinadas zonas, sobre todo en los detalles. Lo último que pinté fueron los zapatos y las peanas y así tener un sitio por donde poder sujetar.
Por último hablar sobre la base. Es cartón pluma al que le he realizado un vaciado con las formas de las peanas de cada figura y que quedasen mas sujetas. Lo he forrado con un papel blando que se adaptaba bien a esos vaciados y en los agujeros he puesto cinta adhesiva de doble cara. A la derecha puedes ver parte de todo el proceso.
Al margen de todo, este paquetito lo compré mas barato de lo normal ¿por qué? Si miras atentamente las fotos verás que hay algo que no cuadra. Hay dos figuras repetidas. Tenemos dos zurdos, dos McCartneys. Porque nadie es perfecto. Aún así estamos a la búsqueda del cuarto Beatle, ¿o aquí sería el quinto?